La tecnología como experiencia

Opiniones de los lectores

El libro presenta una densa exploración de la relación entre las personas y la tecnología, haciendo hincapié en las experiencias subjetivas y emocionales que los usuarios tienen con los productos tecnológicos. Aunque incluye interesantes debates filosóficos y estudios de casos, muchos críticos consideran que carece de consejos prácticos para los diseñadores, con una redacción excesivamente prolija y compleja que puede alejar a quienes buscan medidas concretas para mejorar la experiencia del usuario.

⬤ Aborda importantes cuestiones sociales, económicas e interpersonales
⬤ ofrece perspectivas filosóficas
⬤ incluye notables estudios de casos
⬤ relevante para futuristas y profesionales de las TI
⬤ contenido bien documentado.

⬤ Carece de sugerencias prácticas de diseño
⬤ lenguaje excesivamente denso y complejo
⬤ estilo de redacción ampuloso
⬤ puede resultar frustrante para los lectores que busquen ideas prácticas
⬤ podría considerarse repetitivo.

(basado en 2 opiniones de lectores)

Título original:

Technology as Experience

Contenido del libro:

En Technology as Experience (La tecnología como experiencia), John McCarthy y Peter Wright sostienen que cualquier explicación de lo que suele denominarse la experiencia del usuario debe tener en cuenta los aspectos emocionales, intelectuales y sensuales de nuestras interacciones con la tecnología. No sólo utilizamos la tecnología, sino que vivimos con ella. Ofrecen un nuevo enfoque para entender la interacción persona-ordenador a través del examen de la experiencia sentida de la tecnología. Basándose en el pragmatismo de filósofos como John Dewey y Mijail Bajtin, proporcionan un marco para un análisis más claro de la tecnología como experiencia.

Al igual que Dewey, en Art as Experience, defendía que el arte forma parte de la experiencia cotidiana y no está aislado en un museo, McCarthy y Wright muestran cómo la tecnología está profundamente arraigada en la vida cotidiana. La «integración entusiasta» o naturaleza trascendente de la experiencia estética, dicen, es un modelo de lo que podría llegar a ser la experiencia humana con la tecnología.

McCarthy y Wright ilustran su marco teórico con ejemplos reales que abarcan desde las compras por Internet hasta el envío de ambulancias. Su forma de entender la interacción entre el ser humano y el ordenador -considerándola creativa, abierta y relacional, parte de la experiencia sentida- es una medida de la plenitud del potencial de la tecnología para ser algo más que meramente funcional.