La resurrección de la inmortalidad

Título original:

The Resurrection of Immortality

Contenido del libro:

Si los humanos no son capaces de inmortalidad, entonces las doctrinas escatológicas del cielo y el infierno tienen poco sentido. En eso están de acuerdo los cristianos. Pero no todos los cristianos están de acuerdo sobre si los humanos son esencialmente inmortales. Algunos sostienen que la Iglesia primitiva hizo bien en tomar prestado de los antiguos filósofos griegos su sentido de la inmortalidad para interpretar los pasajes bíblicos sobre la vida después de la muerte. Otros, sin embargo, sugieren que somos intrínsecamente mortales y sólo condicionalmente inmortales. Este último punto de vista suele asociarse con una interpretación aniquilacionista de la doctrina del infierno y un rechazo del tormento eterno. En un análisis y argumento filosóficos, McLeod-Harrison propone que los seres humanos son, en efecto, inmortales, pero no esencialmente. Pero tampoco somos inmortales accidental o condicionalmente. Por el contrario, la inmortalidad es una propiedad duradera, una propiedad que no podemos perder una vez creados. McLeod-Harrison delinea cuidadosamente el sentido de la inmortalidad que defiende y proporciona un argumento filosófico ampliamente cristiano para ello. El argumento, si es correcto, deja la reciente sugerencia de que los no redimidos son aniquilados sobre pies metafísicos inestables.

Sin embargo, McLeod-Harrison no defiende el castigo consciente eterno para los no redimidos, sino que sugiere algunas formas de pensar sobre la posibilidad de una salvación universal. ""McLeod-Harrison ofrece un análisis metafísico admirablemente cuidadoso del concepto de inmortalidad humana, argumentando en última instancia a favor de la imposibilidad de la aniquilación personal. Se esté o no finalmente de acuerdo con su tesis, esta obra es un recurso inmensamente valioso, especialmente en lo que se refiere a las discusiones sobre antropología filosófica y la doctrina del infierno."" --James S. Spiegel, catedrático de Filosofía y Religión, Taylor University ""En este fascinante, aunque complicado, argumento contra la inmortalidad condicional (aniquilacionismo), el autor no afirma que el alma humana sea esencialmente inmortal; sostiene, en cambio, que, una vez que un vástago humano adquiere un libre albedrío plenamente robusto y se convierte así en plenamente humano, es metafísicamente imposible que deje de existir por completo. Se acepten o no todos los detalles de este argumento, proporciona un giro original e intrigante a las discusiones teológicas sobre el libre albedrío." --Thomas Talbott, profesor emérito de Filosofía, Universidad de Willamette, autor de El ineludible amor de Dios ""Suelo decir que el futuro del debate sobre el infierno está entre la inmortalidad condicional y la reconciliación universal, y no es ningún secreto que creo que el argumento bíblico a favor de la primera es inatacable.

Sin embargo, aunque no estoy convencido de que este volumen defienda una inmortalidad humana duradera y universal, promete añadir precisión al lenguaje de la inmortalidad y ocupar un lugar destacado en la vertiente filosófica de ese debate de cara al futuro" --Christopher M. Date, editor de Rethinking Hell: Readings in Evangelical Conditionalism Mark S. McLeod-Harrison es profesor de Filosofía en la Universidad George Fox.