La religión y su reforma en América, de los orígenes a 1730: Antología de fuentes primarias

Título original:

Religion and Its Reformation in America, Beginnings to 1730: An Anthology of Primary Sources

Contenido del libro:

Comenzando con una breve mirada a lo que los colonos europeos fueron capaces de hacer de las creencias y prácticas indígenas, y terminando en 1730 -el año anterior a la primera obra publicada del reverendo Jonathan Edwards-, Religion and Its Reformation in America pretende destacar los rasgos distintivos del cristianismo en su primer siglo de vida en las colonias que se convertirían en Estados Unidos.

La Iglesia de Inglaterra trasplantada en Virginia, el catolicismo de Maryland y, más tarde, la experiencia cuáquera de Pensilvania están bien representados, pero el mayor énfasis recae en los "puritanos" de Massachusetts y Connecticut. Sorprendentemente, los líderes de una población emigrante produjeron una literatura religiosa que, tanto en cantidad como en perspicacia intelectual, no tiene parangón en ningún otro lugar colonial del que se tenga constancia. Basándose en una serie de textos escritos en el continente y, en algunos casos, en una experiencia personal de iglesias reformadas en el extranjero, estos llamados puritanos buscaron una Nueva Iglesia en una Nueva Inglaterra providencialmente provista.

Los historiadores especializados en este periodo conocen bien las líneas generales de su historia: la excitación del final de los tiempos, el establecimiento de una nueva eclesiología radical (que llegó a conocerse como congregacionalismo), la confusión y el compromiso de la segunda y tercera generación, que se negaron a reconocer que su radicalismo había sido un error. Sin embargo, aquí se presenta, tanto para estudiosos como para estudiantes, algo que se aproxima a un registro literario completo: no sólo nombres y fechas y credos y plataformas, sino una rica experiencia humana de motivos, energía, acción y afecto. Religión, sin duda, con la reforma como fuerza motriz, pero también literatura en su mejor sentido, deseosa de poner patas arriba los supuestos imperantes.