La política del imperio: Estados Unidos, Israel y Oriente Próximo

Título original:

The Politics of Empire: The US, Israel and the Middle East

Contenido del libro:

Este libro ofrece una concepción única de la construcción del imperio estadounidense, que vincula la expansión en el extranjero con 1) el crecimiento de un Estado policial y el descenso del nivel de vida; 2) el espionaje global avanzado impulsado tecnológicamente de adversarios y aliados con el descenso de la competitividad económica y las derrotas militares; 3) los compromisos a gran escala y a largo plazo de recursos económicos y militares para guerras en Oriente Medio en detrimento de los principales intereses corporativos, pero en beneficio de un Estado paria, Israel; y 4) el poder de un Estado extranjero (Israel) sobre la política estadounidense a través de su configuración de poder nacional prosionista. La interacción de estas cuatro características específicas de la construcción del imperio estadounidense no tiene precedentes pasados ni presentes entre los Estados imperiales.

Debido a la influencia israelí-sionista en la política imperial estadounidense, las principales metas y objetivos de las guerras imperiales se sitúan en Oriente Medio. Los objetivos de la política israelí y sionista de EEUU en Oriente Medio son aumentar el poder regional israelí y la desposesión del pueblo palestino. Sin embargo, el coste de billones de dólares de las guerras estadounidenses para Israel ha alienado a la gran mayoría de la sociedad estadounidense y ha abierto una brecha entre la élite política que respalda nuevas guerras para Israel y la opinión pública que prioriza el bienestar económico nacional.

Este estudio pone de relieve cómo se han deteriorado los cimientos internos de la construcción del imperio y han obligado a la presidencia imperial a modificar su enfoque, buscando negociaciones diplomáticas en lugar de nuevas intervenciones militares, concretamente en los casos de Siria e Irán. La política imperial se considera una lucha de poder multilateral entre las élites militares y económicas, Israel y la configuración de poder sionista, los movimientos de resistencia y los regímenes nacionalistas de ultramar, y la opinión pública estadounidense.

La resolución de esta lucha de poder es más que una cuestión académica; determinará si EE.UU. se convertirá en un Estado policial en toda regla, gobernado por los peones de un Estado racista-colonial implicado en guerras interminables o si volverá a sus raíces como república democrática independiente libre de enredos extranjeros".