La Isla de los Esclavos y La Colonia

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Título original:

Slave Island & The Colony

Contenido del libro:

LA ISLA DE LOS ESCLAVOS fue estrenada el lunes 5 de marzo de 1725 por la compañía de Lelio Riccoboni y la Comédie-Italienne en el Hôtel de Bourgogne de París. El éxito fue tal que se representó durante veinte funciones seguidas, una cifra inaudita, y su notoriedad la convirtió en la comidilla de la ciudad. El 18 de junio de 1725, Marivaux la siguió con la comedia en tres actos LA NOUVELLE COLONIE (La nueva colonia), también en la Comédie-Italienne. Tuvo una fría acogida y se clausuró al día siguiente. En diciembre de 1750, Marivaux publicó una revisión en un acto titulada LA COLONIE en el Mercure de France. Se cree que se representó una o dos veces en el escenario privado del Conde de Clermont. En los últimos veinticinco años, ambas obras se han reestrenado con frecuencia, sobre todo en Francia y el Reino Unido. Sus temas han recobrado actualidad y hacen que Marivaux parezca especialmente clarividente en cuestiones de género y clase, esclavitud y colonialismo.

«Los criados, hombres y mujeres, de Marivaux son claramente diferentes de los de las comedias anteriores. Los criados tradicionales son pícaros y rufianes. Los de Marivaux se comportan mejor y se parecen más a sus amos, a los que pueden interpretar en ocasiones sin demasiada improbabilidad. En LA ISLA DE LOS ESCLAVOS, esto se convierte en una teoría de la filantropía, con una inversión de clases, los amos convertidos en criados y viceversa. Tras unas cuantas represalias insolentes y vejatorias, pronto se impone la buena naturaleza. Amos y criados se reconcilian y se abrazan. Es la Saturnalia del Siglo de Oro. Esta pequeña obra de Marivaux es casi una pastoral revolucionaria precoz para 1792». -Charles Sainte-Beuve, 1854.

«(En LA ISLA DE LOS ESCLAVOS) Si los códigos sociales se vuelven del revés, ¿se vengará el esclavo del amo y sabrá éste obedecer? Pasando de las intrigas a las falsas pretensiones y a los rebotes ridículos, tras el toque ligero de Marivaux, esta comedia política arroja una luz reveladora sobre la sociedad y la humanidad.» -La Nouvelle République

«ISLA DE ESCLAVOS» es un himno y una celebración del teatro, en el que los cómicos interpretan papeles estelares, mientras los protagonistas románticos se sientan a observarlos. El cruce de órdenes y demandas de amistad y amor conforman la acción. Este es el país del beso y la reconciliación, donde la bondad y la virtud son las cualidades más preciadas, donde el perdón tiene la sartén por el mango y el resultado final es un abrazo. El final feliz es propio de la comedia y los personajes evolucionan sin rastro de rencor o resentimiento. Aún hoy esta obra es una oportunidad para reflexionar sobre el uso justo del poder, una lección de humanidad y fraternidad, pero también ofrece al público culto de masas una forma de reflexionar sobre cómo se relacionan la dominación, la censura y el humor, una consideración nada desdeñable tras la masacre de Charlie Hebdo y los posteriores tiroteos tanto de policías como de asesinos.» -Sylvie Fernando

«Pero lo que resulta especialmente interesante en LA COLONIA es que la cuestión de la igualdad entre hombres y mujeres no se resume en una serie de disputas sobre principios, legítimas, sí, pero en última instancia trilladas. Marivaux lo utiliza como punto de partida para desembocar en una observación política verdaderamente original: la probada imperfección de todas nuestras sociedades actuales es el resultado de haber dejado de lado a las mujeres en el momento de concebirlas. Puesto que la raza humana es dúplex, ¿cómo podemos esperar encontrar un régimen político viable si sólo fue concebido por y para uno de los dos componentes? « -Guillaume Grandjean