La Gravedad Humana: Análisis de un Ingeniero sobre las Relaciones Sociedad-Gobierno

Título original:

Human Gravity: An Engineer's Analysis of Society-Government Relations

Contenido del libro:

La humanidad vive dentro de 4 limitaciones inflexibles: la velocidad de la luz, la conservación de la masa-energía, la ineficacia en la conversión de calor en trabajo y la ley de la demanda. La sociedad se forma para hacer frente a las limitaciones. El gobierno y la religión establecen límites para que la sociedad pueda modelar y manipular las limitaciones.

A partir de las ecuaciones de conservación masa-energía de la sociedad y su economía, pueden desarrollarse una dimensión social, la consecuencia moral, y una dimensión gubernamental, la equidad. Se propone un modelo para relacionar estas dimensiones desarrollando la Línea Operativa Societal (SOL) y la definición de Productividad.

La estabilidad de una sociedad puede determinarse por las fuerzas aplicadas a la SOL. Una sociedad estable equilibrará las fuerzas de la productividad y el orden frente a la fuerza de la adversidad. Un caso especial de las fuerzas que actúan sobre el SOL conduce a la definición de un derecho, el elemento fundamental de una Sociedad Libre.

Mejorar la equidad mediante la toma de productividad de la sociedad por parte del gobierno es la base de la Sociedad Dirigida. Para que la sociedad sea más justa, el gobierno toma más productividad y reduce el libre ejercicio de los derechos hasta el punto de exigir una conformidad total.

El papel del gobierno en una sociedad libre puede modelarse comparando la función económica de la sociedad con una estructura de ingeniería común: la caldera. Esta función se asemeja a la de mantener limpia el agua de la caldera eliminando la contaminación mediante la "purga". En una sociedad gestionada, el gobierno manipula la "purga" para aumentar su poder e influencia.

La aplicación de estos modelos de ingeniería nos ayuda a comprender los equilibrios materiales y energéticos de nuestra relación sociedad-gobierno. Una sociedad libre prospera gracias a la transferencia de energía espiritual ilimitada, mientras que una sociedad gestionada se ve limitada por la distribución finita de las cosas.