Rape Culture
Las revelaciones y acusaciones de acoso y agresión sexual en el Parlamento australiano han provocado respuestas furibundas. Los líderes políticos han intentado limitar los daños aludiendo a la ausencia de cargos penales, resistiéndose a un debate sobre la arraigada misoginia.
Los defensores de las supervivientes de abusos ven en ello una continuación de la larga historia de normalización de los abusos contra la mujer, perpetuándolos mediante mecanismos legales y el ejercicio del poder. Este callejón sin salida representa el funcionamiento de una «cultura de la violación» en la que los malos tratos a las mujeres se aceptan como algo habitual. Se ha abusado de las teorías psicológicas de la represión, contribuyendo al reciclaje de la llamada teoría de los «falsos recuerdos», según la cual el recuerdo del trauma se considera inventado, tal vez implantado por los terapeutas.
Es preocupante que esta compleja cuestión sea aireada por periodistas, políticos y abogados sin ningún conocimiento clínico del trauma, la memoria y las implicaciones para la ayuda. Las mujeres no deben ser representadas como mentalmente inestables, indignas de confianza o gobernadas por sus hormonas mientras sus agresores se refugian en legalismos, ofuscaciones y el oscuro arte del cálculo político.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)