La crisis eclesial en Ucrania: Y su solución según los sagrados cánones

Título original:

The Ecclesial Crisis in Ukraine: And Its Solution According to the Sacred Canons

Contenido del libro:

Se trata de una lectura esencial para que todos los creyentes ortodoxos comprendan mejor lo que significa la crisis ucraniana para el futuro de su Iglesia. También ayudará a otros a ver más allá de la caracterización de la crisis como un acontecimiento político en el contexto de las relaciones entre Rusia y Occidente. Deja claro que en el fondo se trata de una disputa eclesiológica que reclama una solución conciliar.

En otoño de 2018, la Iglesia Ortodoxa Rusa rompió la comunión con el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla tras el anuncio de este último Sínodo de su intención de crear una Iglesia Ortodoxa de Ucrania (IOU) autocéfala. En diciembre de ese año se convocó un concilio formal en Kiev y se creó este nuevo cuerpo eclesial a partir de dos grupos ucranianos considerados anteriormente cismáticos por todas las iglesias ortodoxas del mundo. Todo esto ocurrió sin que el Patriarcado Ecuménico intentara buscar el consenso de todas las iglesias ortodoxas antes de emprender esta acción.

Más de dos años después, la recién creada OCU sigue sin ser reconocida por la inmensa mayoría de los creyentes ortodoxos del mundo, a pesar de que en ese tiempo ha sido reconocida como ortodoxa por el Patriarcado de Alejandría y las Iglesias de Chipre y Grecia. Pero incluso este reconocimiento no ha estado exento de importantes voces discordantes. Entre ellas, la del abad del célebre monasterio chipriota de Kykkos, el metropolita Nikiforos. En este conciso texto explica elocuentemente por qué las acciones del Patriarcado Ecuménico han creado un cisma en la Iglesia Ortodoxa mundial y cómo, a su vez, reflejan la promoción de una nueva eclesiología que distorsiona la comprensión tradicional de la Iglesia Ortodoxa como encabezada únicamente por Cristo mismo. Tiene claro que el único camino para sanar el cisma que no cesa es el retorno a una forma de relaciones interortodoxas que respete tanto la conciliaridad como la jerarquía. Al hacerlo, subraya su máximo respeto por el lugar histórico del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla y la esperanza de que abandone el camino que sigue actualmente para volver a ocupar el lugar que le corresponde en la pluralidad de la Iglesia Ortodoxa.