La castración y el reino celestial: Un cuento popular ruso

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Título original:

Castration and the Heavenly Kingdom: A Russian Folktale

Contenido del libro:

De las muchas sectas que se separaron de la iglesia ortodoxa rusa oficial en el siglo XVIII, una fue universalmente despreciada. Sus miembros eran campesinos del corazón de Rusia, expertos en las artes de la ganadería, que volvieron sus cuchillos contra sí mismos para convertirse en eunucos por el reino de los cielos.

Convencidos de que la salvación sólo llegaba con la extirpación literal de los instrumentos del pecado, se les conocía como Skoptsy (los autocastrados). Su comunidad prosperó hasta bien entrado el siglo XX, cuando fue destruida por el Terror estalinista. Laura Engelstein relata la asombrosa historia de la secta en una gran hazaña de reconstrucción histórica.

Describe las reacciones horrorizadas que suscitó la secta entre los forasteros, incluidos burócratas, médicos y teólogos indignados.

Y lo que es más importante, permite a los skoptsy definir los contornos de su historia y el significado de su sacrificio. Su hábil manejo de las cartas y cuadernos de los Skoptsy confiere a su libro una profundidad y un patetismo inusuales, y ofrece un relato desgarrador del exilio voluntario y de una creencia religiosa tan fuerte que sus seguidores aceptaron un dolor terrible y la negación de una experiencia humana básica.

Aunque los Skoptsy expresan alegría por su salvación, las palabras de los creyentes más fervientes revelan el sufrimiento psicológico de la vida en los márgenes de la sociedad. La secta no era una tribu extranjera ni una importación exótica, sino que sus miembros procedían de la sociedad campesina en la que se esperaba el matrimonio y la edad adulta comenzaba con la noche de bodas. Apartados por el mismo acto que garantizaba su redención, estos corderos de Dios se convirtieron en expertos en ocultar su identidad sectaria cuando se relacionaban con sus vecinos ortodoxos.

La interacción era necesaria, explica Engelstein, ya que la supervivencia de los skoptsy dependía del reclutamiento de nuevos miembros y del éxito en la agricultura y el comercio. Consciente de que algunos prejuicios han cambiado poco a lo largo de los siglos, Engelstein advierte que no debemos arrojar la sombra de nuestra propia angustia sobre la historia de los skoptsy. Su sufrimiento físico fue algo que aceptaron de buen grado.

En La castración y el reino celestial, ha elaborado una historia extraordinaria que también ilumina los misterios del corazón humano.