La carta racial: De las tecnologías del juego a las minorías modelo

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Título original:

The Race Card: From Gaming Technologies to Model Minorities

Contenido del libro:

Ganador del Premio del Libro Americano 2020, concedido por la Fundación Before Columbus.

Cómo se han utilizado los juegos para establecer y combatir los estereotipos raciales de los asiático-americanos.

Al igual que Pokmon Go remodeló las geografías de nuestros barrios y los flujos humanos de nuestras ciudades, mapeando lo virtual sobre las realidades vividas, también los juegos y la teoría de los juegos han desempeñado un papel en nuestra comprensión contemporánea de la raza y la formación racial en los Estados Unidos. Desde la Ley de Exclusión China y el internamiento de los japoneses-americanos hasta el mito de la minoría modelo y la globalización de la mano de obra asiática, Tara Fickle muestra cómo los juegos y la teoría de los juegos han dado forma a las ficciones raciales en las que se basa la nación. A partir de una amplia gama de textos literarios y críticos, juegos analógicos y digitales, relatos periodísticos, campañas de marketing y material de archivo, Fickle ilumina las formas en que los asiático-americanos han tenido que encajar en los papeles, jugar el juego y seguir las reglas para ser vistos como valiosos en Estados Unidos.

Explorando momentos clave en la formación de las modernas relaciones raciales en EE.UU., The Race Card traza un nuevo rumbo en la erudición del juego al reorientar nuestra atención desde los juegos como vehículos de empoderamiento que permiten a las personas habitar nuevas identidades, hacia las formas en que los juegos se utilizan como instrumentos de poder blando para promover agendas políticas de arriba hacia abajo. Tara Fickle tiende un puente entre la mecánica de los videojuegos y los enfoques más teóricos de la retórica del juego, y revela cómo esta intersección nos permite pasar por alto el predominio de los tropos de los juegos en la cultura nacional. The Race Card revela esta relación como una de profunda intimidad ideológica e histórica: cómo los juegos a los que jugamos se han filtrado en todos los aspectos de nuestras vidas tanto de forma monótona como malévola.