La breve oración de Vajradhara: Una enseñanza sobre el linaje y el mantenimiento de la propia naturaleza

Opiniones de los lectores

Actualmente no hay opiniones de lectores. La calificación se basa en 2 votos.

Título original:

The Short Vajradhara Prayer: A Teaching on the Lineage and Sustaining One's Nature

Contenido del libro:

El Dorje Chang Tungma es probablemente la más conocida de las oraciones Kagyu, tradicionalmente recitada antes de las sesiones de enseñanza y a menudo recitada por los practicantes como parte de su práctica diaria. Casi todo el mundo se sabe esta oración de memoria, pero tal familiaridad puede ser peligrosa.

Es demasiado fácil recitar la oración sin pensar, como un loro, sin concentrarse en las palabras ni reflexionar sobre el significado de lo que decimos. Estudiándola, deberíamos comprenderla mejor y apreciar mejor su profundidad. En muchos sentidos, es mucho más que una oración corriente.

Incluye todas las etapas importantes del entrenamiento en el mahamudra: repulsión al samsara, renuncia, devoción al gurú, meditación sin distracción, etcétera.

Como tal, es como una instrucción esencial. Al principio, la plegaria recuerda a todos los maestros del linaje Kagyu.

Cuando hablamos de linaje, nos referimos a algo más que a la transmisión física de maestro a alumno. El linaje es una línea espiritual ininterrumpida que comienza con la fuente y continúa ininterrumpidamente de generación en generación. No sólo eso, a medida que recitamos el cuerpo de la oración, se nos recuerdan las prácticas centrales del mahamudra: la repulsión son las piernas de la práctica, la devoción incondicional es la cabeza de la práctica, la no distracción es el núcleo de la práctica de meditación, y así sucesivamente.

Originalmente, esta enseñanza formaba parte del 29º Monlam Chenmo Kagyu y se impartió en las circunstancias más propicias. Ocurrió en el lugar perfecto, Dorje Den, el lugar sagrado donde el Señor Buda alcanzó la iluminación; en el momento perfecto, justo después del Año Nuevo tibetano durante el Mes de los Milagros; y los cuatro pilares de la sangha - bikshus, bikshunis, upasikas y upasikis - estuvieron presentes, junto con muchos rinpoches, tulkus y khenpos del Karma Kamtsang. Del prefacio del Karmapa, Ogyen Trinley Dorje.