Jeremiah: A Parable of Jesus
El Evangelio según Jeremías ofrece algunas de las mejores declaraciones de esperanza y promesa de toda la Biblia. Más allá de su costosa obediencia y fiel resistencia, Jeremías expresó el mensaje evangélico de esperanza.
Fue el profeta de la bondadosa promesa de Dios: «Porque yo sé los planes que tengo para vosotros, planes de prosperaros y no de dañaros, planes de daros esperanza y un futuro». Le decepcionaría ser recordado sólo por sus mensajes de juicio y lamentación, porque se veía a sí mismo como el profeta de la nueva alianza del Señor. Mucho antes de que el Verbo se hiciera carne y habitara entre nosotros, Jeremías encarnó la mentalidad de Getsemaní, tomó su cruz cada día y vivió en el poder de la resurrección.
En su contundente mensaje profético, prevalecía la esperanza del Evangelio. La vida de Jeremías fue una parábola de Jesús que apuntaba hacia «El Señor, justicia nuestra».
Jeremías no sermoneaba, encarnaba la palabra del Señor en su vida y en su carácter. No era el Encarnado, pero vivió una vida encarnada.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)