Puntuación:
El libro ofrece una visión exhaustiva de la historia de las actividades de inteligencia de Estados Unidos y Rusia durante la Guerra Fría, centrándose especialmente en el reciente contexto de los canjes de espías. Sin embargo, ha recibido críticas dispares, ya que algunos lectores lo consideran demasiado detallado y enrevesado, lo que provoca una experiencia de lectura frustrante.
Ventajas:Destaca el contexto de los esfuerzos de los servicios de inteligencia estadounidenses y rusos a lo largo de 60 años, ofrece una visión de los recientes canjes de espías y se basa en los amplios conocimientos del autor sobre la historia de la Guerra Fría.
Desventajas:Demasiado detallado y difícil de seguir, con demasiados nombres y casos que llevan a algunos lectores a sentirse abrumados. La narración carece de un flujo cronológico coherente, lo que la hace confusa y superficial para algunos, y se le critica por no aportar información nueva.
(basado en 3 opiniones de lectores)
Spy Swap: The Humiliation of Russia's Intelligence Services
El lunes 4 de marzo de 2019, Sergei Skripal y su hija Yulia, de 33 años, se desplomaron en el centro de Salisbury, en Wiltshire. Ambos sufrían los efectos del A-234, un agente nervioso Novichok de grado militar de tercera generación fabricado en Rusia. Mientras se identificaba rápidamente a tres sospechosos, todos ellos agentes del GRU, también se determinó que el picaporte de la puerta de la vivienda suburbana de los Skripal había sido contaminado con la toxina.
Aunque los Skripal habían vivido en la ciudad de la catedral durante los últimos siete años, lo que los vecinos de Sergei no sabían era que había sido coronel del servicio de inteligencia militar de la Federación Rusa. En julio de 1996 fue destinado a Madrid en calidad de agente diplomático, donde fue cultivado por Pablo Miller, un agente del MI6 que operaba como hombre de negocios bajo el alias de Antonio Alvares de Idalgo. El reclutamiento de Sergei por Miller fue uno de los muchos éxitos logrados por las agencias occidentales tras el colapso del bloque soviético. Estos triunfos del contraespionaje tuvieron su origen en un proyecto conjunto del FBI y la CIA cuyo nombre en clave era COURTSHIP y que se basaba en la táctica bastante arriesgada de acercarse a casi cualquier oficial identificado del KGB o del GRU, en casi cualquier entorno, una técnica conocida como "lanzamiento en frío". Pronto dio resultados: en cinco años, COURTSHIP había conseguido una veintena de activos.
Sergei, cuyo nombre en clave era FORTHWITH, fue traicionado en diciembre de 2001. Detenido en 2004, fue condenado por alta traición en Rusia, pero posteriormente fue incluido en un canje de prisioneros en julio de 2010 y llevado al Reino Unido. El camino hacia el atentado contra su vida había comenzado.
El canje de espías de Viena fue la culminación de un plan de la CIA para liberar a un individuo concreto, Gennadi Vasilenko, que había sido el topo clave de la Agencia dentro del KGB desde marzo de 1979. Para conseguir la influencia necesaria, el FBI se abalanzó sobre una amplia red en Estados Unidos, poniendo fin a una operación de vigilancia, cuyo nombre en clave era GHOST STORIES, que duró diez años. Vladimir Putin, deseoso de evitar la vergüenza de las detenciones, autorizó personalmente el intercambio, sin conocer la verdadera situación de Vasilenko. El Kremlin no se enteró del valor de Vasilenko ni de la magnitud del engaño hasta que se completó la transacción y otros dos espías rusos fueron sacados de Moscú. Por primera vez, un gobierno ruso había sido persuadido de liberar a cuatro traidores y enviarlos a Occidente. La humillación fue completa. Como revela Spy Swap, la retribución de Putin se manifestaría en un tranquilo pueblo de mercado de Wiltshire.
© Book1 Group - todos los derechos reservados.
El contenido de este sitio no se puede copiar o usar, ni en parte ni en su totalidad, sin el permiso escrito del propietario.
Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)