Incitación: La yihad occidental de Anwar Al-Awlaki

Título original:

Incitement: Anwar Al-Awlaki's Western Jihad

Contenido del libro:

El relato definitivo de la carrera y el legado del exponente occidental más influyente de la yihad violenta.

Anwar al-Awlaki fue, según uno de sus seguidores, "el principal hombre que tradujo la yihad al inglés". Cuando fue asesinado por un ataque estadounidense con drones en 2011, se había convertido en un líder espiritual para miles de extremistas, especialmente en Estados Unidos y Gran Bretaña, donde pretendía hacer del islamismo violento "algo tan americano como la tarta de manzana y tan británico como el té de la tarde." Alexander Meleagrou-Hitchens se basa en una amplia investigación entre antiguos colegas, amigos y seguidores de al-Awlaki, incluidas entrevistas con terroristas convictos, para explicar cómo estableció su red y por qué su mensaje resonó entre los musulmanes descontentos de Occidente.

Natural de Nuevo México, al-Awlaki saltó a la fama en 2001 como imán de una mezquita de Virginia a la que asistieron tres de los secuestradores del 11-S. Tras marcharse a Gran Bretaña en 2002, comenzó a pronunciar conferencias y sermones populares cada vez más radicales y antioccidentales. Tras marcharse a Gran Bretaña en 2002, comenzó a pronunciar conferencias y sermones populares cada vez más radicales y antioccidentales. En 2004 se trasladó a Yemen, donde acabó uniéndose a Al Qaeda y supervisó numerosos complots terroristas internacionales de gran envergadura. Mediante transmisiones de vídeo en directo a mezquitas y universidades occidentales, YouTube, revistas y otros medios de comunicación, pronto se convirtió en el principal reclutador de islamistas violentos de habla inglesa del mundo. Una medida de su éxito es que se le ha relacionado con aproximadamente una cuarta parte de los islamistas condenados por delitos relacionados con el terrorismo en Estados Unidos desde 2007.

A pesar de la naturaleza extrema de estas actividades, Meleagrou-Hitchens sostiene que la estrategia y las tácticas de al-Awlaki se entienden mejor a través de la teoría tradicional de los movimientos sociales. Con claridad y brío, muestra cómo nacen los fundamentalistas violentos.