Faulkner y la política de la lectura

Título original:

Faulkner and the Politics of Reading

Contenido del libro:

Con este estudio, Karl F. Zender ofrece nuevas lecturas de novelas individuales, temas y motivos, al tiempo que evalúa el impacto de las recientes interpretaciones politizadas en nuestra comprensión de los logros de Faulkner. Al reconocer con simpatía la necesidad de descentrar el canon, el interrogatorio inquisitivo de Zender sobre la teoría actual despeja un espacio de respiro para Faulkner y sus lectores entre los restos más fríos de la Nueva Crítica y los excesos del postestructuralismo.

Cada capítulo se abre con una presentación equilibrada de los auténticos dones que la teoría contemporánea ha otorgado a nuestra comprensión de una novela o un problema concretos de la crítica de Faulkner, para proseguir con una lectura innovadora. "La política del incesto" desafía las antiguas interpretaciones psicoanalíticas del uso que Faulkner hace del motivo del incesto, y "La intimidad de Faulkner" defiende la dificultad o "reticencia" del novelista como una resistencia estética contra el rudo candor de la cultura desregionalizada y despersonalizada. Los capítulos siguientes abordan las volátiles cuestiones de las representaciones que Faulkner hace de las mujeres y de los afroamericanos, y una lectura detenida del clásico "Barn Burning" critica la tendencia actual a difuminar los conceptos de patriarcado y paternidad.

El elegíaco capítulo final, "¿Dónde está el condado de Yoknapatawpha? "se basa en una comparación con la ficción de John Updike en Pensilvania y en una lectura de The Wintering, de Joan Williams, para explorar la reticencia de Faulkner a representar las realidades cotidianas de la vida sureña en sus últimas novelas. Zender demuestra que el repliegue estilístico de Faulkner intenta "transformar en belleza" su alienación del mundo de posguerra y su miedo a envejecer. Que el propio Faulkner and the Politics of Reading recupere y dé nuevo lustre a la belleza de Faulkner complacerá sin duda, en palabras del autor, "a aquellos lectores... para quienes la literatura es menos un mecanismo de cambio social que una fuente de placer". La originalidad de su visión crítica inspirará a los estudiosos de Faulkner, a los estudiantes de literatura norteamericana y a los lectores en general.