En busca del ser: La cuarta vía hacia la conciencia

Opiniones de los lectores

El libro ofrece una mezcla de interpretaciones de las enseñanzas de Gurdjieff, con una acogida desigual por parte de los lectores. Aunque algunos aprecian sus ideas y su relevancia, muchos lo critican por estar mal escrito, ser repetitivo y carecer de la profundidad de las obras originales. La engañosa atribución de la autoría también ha provocado descontento entre quienes conocen las enseñanzas de Gurdjieff.

Algunos lectores encontraron en el libro una introducción útil y transformadora a las enseñanzas de Gurdjieff, con una interpretación reflexiva que resuena entre los buscadores modernos. Muchos apreciaron su relevancia y su potencial para una profunda autorreflexión, y varios destacaron su capacidad para desafiar el pensamiento de los lectores.

Muchas reseñas señalan que el libro está mal escrito, es repetitivo y, sobre todo, una reafirmación de obras anteriores de Ouspensky. Hay una gran insatisfacción con respecto a la autoría, y varios lectores se sienten engañados por la afirmación de la portada de que lo escribió Gurdjieff. La ausencia de orientaciones prácticas y la presentación de ideas con poca profundidad también decepcionaron a numerosos lectores.

(basado en 54 opiniones de lectores)

Título original:

In Search of Being: The Fourth Way to Consciousness

Contenido del libro:

Hace más de cien años, G. I.

Gurdjieff introdujo en Rusia una enseñanza espiritual de evolución consciente: una forma de gnosis o "conocimiento del ser" transmitida desde la más remota antigüedad. Las primeras charlas de Gurdjieff en Europa se publicaron en forma de fragmentos cronológicos conservados por sus cercanos seguidores P. D.

Ouspensky y Jeanne de Salzmann. Ahora estas enseñanzas se presentan como un todo exhaustivo, que abarca una gran variedad de temas, incluidos los estados de conciencia, los métodos de autoestudio, el trabajo espiritual en grupo, las leyes del cosmos y el símbolo universal conocido como Eneagrama.

Gurdjieff respetaba las prácticas religiosas tradicionales, que consideraba divididas en tres categorías generales o "vías": la Vía del Fakir, relacionada con el dominio del cuerpo físico; la Vía del Monje, basada en la fe y el sentimiento; y la Vía del Yogui, centrada en el desarrollo de la mente. Presentó su enseñanza como una "Cuarta Vía" que integra estos tres aspectos en un único camino de autoconocimiento.

Los principios se exponen como una forma de conocer y experimentar un nivel despierto del ser que debe verificarse por uno mismo.