El tercer viaje de Martin Frobisher a la isla de Baffin, 1578

Título original:

The Third Voyage of Martin Frobisher to Baffin Island, 1578

Contenido del libro:

El tercer viaje (1578) de Martin Frobisher a la isla de Baffin fue consecuencia de una lógica errónea y un optimismo excesivo por parte de los aventureros de la efímera "Compañía de Cathay". Su intención original -encontrar una ruta noroccidental hacia Extremo Oriente- se había olvidado en gran medida tras el imaginario descubrimiento de minerales auríferos y argentíferos en Meta Incognita (los Límites Desconocidos), como Isabel I había bautizado el paisaje helado y prohibitivo que Frobisher y diecisiete marinos habían avistado por primera vez dos años antes.

Esta iba a ser la primera experiencia de la nación inglesa en una "fiebre del oro", y si muchos se negaron a dejarse llevar por la promesa de un imperio que rivalizara con el de España, otros, incluida la propia Reina y muchos de sus Consejeros Privados, permitieron que su codicia se impusiera a toda precaución. A medida que los sucesivos análisis de las muestras de mineral iban reduciendo las probabilidades de beneficios futuros, los aventureros aceptaron que se necesitaría una expedición mucho mayor para extraer suficiente mineral para proporcionar un rendimiento adecuado al dinero ya gastado. El resultado -una flota de quince barcos, tripulada por casi quinientos hombres- sigue siendo la mayor flota que jamás haya visitado la isla de Baffin.

Sus afanes en los mares árticos, los casi cómicos fracasos de la navegación y la agotadora tarea de extraer la mayor cantidad posible de mineral en el tiempo que permitía el breve verano ártico, quedaron registrados en un conjunto insuperable de informes de testigos presenciales, todos los cuales, por primera vez, se han reunido en un solo volumen. Complementados con acusaciones extremadamente detalladas y oprobiosas (aunque sustancialmente exactas) sobre el papel de Frobisher en esta empresa por parte de su ex socio, el comerciante Michael Lok, estos registros ofrecen una imagen gráfica, conmovedora y a menudo humorística de un viaje que presagió los gloriosos fracasos de una época posterior de construcción del imperio inglés.