El sangriento camino a Catania: Historia del XIII Cuerpo en Sicilia, 1943

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Título original:

The Bloody Road to Catania: A History of XIII Corps in Sicily, 1943

Contenido del libro:

Este estudio comienza con el desembarco del XIII Cuerpo el 10 de julio de 1943 (Operación Husky) entre Avola y Cassibile, Sicilia. El avance hacia el interior se produjo a lo largo de la carretera costera oriental, en el flanco derecho de la invasión. El terreno estaba formado por sinuosas carreteras estrechas flanqueadas por altas colinas, lo que favoreció a los defensores y las hábiles fuerzas alemanas lo aprovecharon al máximo, plantando cara en cada oportunidad, lo que costó caro en vidas y vehículos a las tropas británicas de asalto, que tuvieron que luchar por cada metro de terreno conquistado. Los puentes de carretera fueron mantenidos por los alemanes hasta el último hombre, estos puntos focales eran esenciales para el plan de ataque de Montgomery. Para reforzar a la presionada División Herman Goering, el 13 de julio se lanzaron sobre Sicilia tropas de la 1ª División Fallschirmjaeger, duros paracaidistas que habían servido en Rusia y cuya inclusión en el orden de batalla alemán supuso un gran impulso para las fuerzas defensoras. La noche en que estas tropas fueron lanzadas en Sicilia también lo hicieron los paracaidistas de la 1ª Brigada Paracaidista británica y en la misma zona de desembarco que los paras alemanes. Los paracaidistas de ambos bandos lucharon cerca de un puente llamado Primosole, que los británicos debían capturar. El lanzamiento aéreo británico fue un desastre, dispersando a los hombres a kilómetros de su objetivo, pocos llegaron al puente sobre el Simeto.

Finalmente, el puente de Primosole cayó en manos de los paras británicos, que resistieron los furiosos contraataques de los paras, tanques y artillería alemanes de la División Herman Goering. La 50th Northumbrian Division tuvo grandes dificultades para abrirse camino y relevar a los hombres de Primosole y, finalmente, los paras británicos tuvieron que abandonar el puente tras sufrir enormes bajas. Los alemanes volvieron a controlar Primosole.

El blindaje de apoyo de la 50ª División de la 4ª Brigada Blindada llegó a Primosole y, a la vista de los tanques que se acercaban, los alemanes se retiraron a la orilla norte y esperaron en posiciones defensivas. La infantería del XIII Cuerpo que avanzaba se había abierto paso en medio del terrible calor y el polvo, luchando en numerosas acciones a su paso, y no estaba en condiciones de montar un ataque, pero Montgomery no les dejaría descansar ya que este cruce en Primosole estaba retrasando el avance de todo el Octavo Ejército. La Brigada 151 (Durham) atacó al día siguiente y fue cortada como el maíz ante la guadaña por los paras alemanes, durante tres días los viñedos de la orilla sur resonaron con los sonidos de la batalla mientras los Durham y los alemanes se enfrentaban en una lucha cuerpo a cuerpo extrema. Una vez cruzado el puente, Montgomery continuó presionando y quiso que el XIII Cuerpo siguiera avanzando hasta el aeródromo de Catania. El XIII Cuerpo llevó a cabo numerosos ataques, pero todos acabaron en desastre y todo el cuerpo quedó retenido en la llanura de Catania.

Montgomery lanzó entonces su gancho de izquierda alrededor del Monte Etna por el XXX Cuerpo, esto dio lugar a otras numerosas y costosas acciones hasta que también se detuvo. Para entonces, los alemanes se preparaban para retirar sus unidades hacia Messina y, a medida que lo hacían, las cansadas unidades británicas avanzaban detrás de ellos. Los alemanes se retiraban por etapas y continuaban realizando acciones dilatorias siempre que podían, lo que costaba a los británicos aún más bajas por cada pueblo y ciudad que encontraban. Durante este periodo, a principios de agosto, los alemanes comenzaron la Operación Lehrgang, que consistía en la evacuación de todas las fuerzas alemanas a través del Estrecho de Messina hacia el territorio continental italiano. La retirada se llevó a cabo con una fría eficacia y una precisión milimétrica. Las fuerzas navales y aéreas aliadas nunca interrumpieron la evacuación y no respondieron eficazmente a la Operación Lehrgang, lo que resultó ser una "ineficacia" a gran escala, ya que las fuerzas alemanas se escabulleron. Los alemanes calificaron justificadamente la evacuación de "retirada gloriosa", pero para los aliados la toma de Sicilia había sido una amarga victoria que volvería para atormentarles. Miles de tropas, vehículos, depósitos de munición y tanques alemanes habían abandonado Sicilia y cuando los Aliados invadieron Italia, estos veteranos curtidos en mil batallas esperaban a las tropas de asalto en Cassino, Anzio y Salerno. Este iba a ser el comienzo de otra campaña sangrienta. En agosto las fuerzas americanas entraron en Messina, los alemanes se habían ido y la ciudad estaba diezmada.