Puntuación:
El libro «Lost Paradise», de Kathy Marks, ofrece un desgarrador relato de los abusos sexuales sistemáticos en la isla de Pitcairn, detallando los recientes juicios de sus habitantes, descendientes de los amotinados del Bounty. Explora las inquietantes estructuras sociales que permitieron la persistencia de tales abusos, ofreciendo una mirada crítica a la negación cultural dentro de la comunidad. Aunque el libro arroja luz sobre los terribles sucesos y la disfunción social, los lectores tienen sentimientos encontrados sobre su organización y profundidad.
Ventajas:⬤ Relato bien escrito y detallado de los juicios por abusos sexuales en la isla de Pitcairn
⬤ revela con eficacia los aspectos oscuros del comportamiento humano y la negación de la sociedad
⬤ perspicaz y que invita a la reflexión
⬤ convincente narrativa periodística
⬤ proporciona un valioso contexto histórico e información sobre la disfunción de la comunidad.
⬤ Título engañoso, más centrado en los juicios recientes que en la historia completa de la isla
⬤ mala organización, da la sensación de ser una colección de artículos más que una narración cohesionada
⬤ a algunos lectores les pareció que la autora expresaba una indebida actitud defensiva sobre sus experiencias en la isla
⬤ puede estar demasiado centrado en los procedimientos judiciales para quienes deseen un análisis más histórico o cultural.
(basado en 71 opiniones de lectores)
Lost Paradise: From Mutiny on the Bounty to a Modern-Day Legacy of Sexual Mayhem, the Dark Secrets of Pitcairn Island Revealed
La isla de Pitcairn, remota y salvaje en el Pacífico Sur, un lugar de imponentes acantilados y fuertes olas, es el hogar de los descendientes de Fletcher Christian y la tripulación del Motín de la Bounty, que huyeron allí con un grupo de doncellas tahitianas tras deponer a su capitán, William Bligh, y apoderarse de su barco en 1789.
Envuelta en mitos, la isla era idealizada por los forasteros, que la consideraban un Shangri-La tropical. Pero, como el mundo descubriría dos siglos después del motín, también era un lugar de siniestros secretos. En este fascinante relato, Kathy Marks narra la inquietante saga y plantea profundas preguntas sobre el comportamiento humano.
En el año 2000, la policía llegó al territorio británico, un pedazo de roca volcánica a cientos de kilómetros de la tierra habitada más cercana, para investigar una acusación de violación de una niña de quince años. Hablaron con docenas de mujeres y descubrieron un rastro de abusos a menores que se remontaba al menos a tres generaciones.
Al parecer, apenas había un hombre de Pitcairn que no hubiera sido víctima de las acusaciones, y apenas una niña que hubiera crecido en la isla, donde sólo viven cuarenta y siete personas, había escapado. Sin embargo, la mayoría de los isleños, incluidas las madres de las víctimas, fingían ignorancia o afirmaban que se trataba de la cultura del Pacífico Sur, el modo de vida de Pitcairn.
Los juicios que siguieron desgarrarían a la comunidad, muy unida e interrelacionada, ya que en cada familia había un delincuente o una víctima, a menudo ambos. El futuro mismo de la isla, que dependía de sus hombres y de su destreza en las lanchas, parecía estar en peligro. Los isleños estaban resentidos con las autoridades británicas, a las que consideraban colonialistas, y con los periodistas recién llegados, que hacían preguntas espinosas y cuyos despachos diarios se analizaban minuciosamente en Internet.
El caso atrajo la atención de todo el mundo. Y a medida que los hombres se sucedían en la improvisada sala de Pitcairn, surgían preguntas inquietantes. ¿Cómo habían permanecido ocultos los abusos durante tanto tiempo? ¿Era inevitable en un lugar así? ¿Era Pitcairn un auténtico Señor de las Moscas?
Marks, una de los seis periodistas que cubrieron los juicios, vivió en Pitcairn durante seis semanas, con los acusados como vecinos. Describe vívidamente los atractivos y las dificultades cotidianas de vivir en una isla tropical remota. Además, fuera de los tribunales, tuvo encuentros diarios con los isleños, no todos ellos civilizados, y observó de primera mano cómo funcionaba la diminuta y claustrofóbica comunidad: los cotilleos, las rencillas, la intimidad claustrofóbica... y la dinámica de poder que había permitido que prosperaran los abusos.
Marks siguió la saga legal y humana hasta su reciente conclusión. Pone al descubierto una sociedad descarriada que ha dejado vidas destrozadas y códigos rotos: un paraíso verdaderamente perdido.
© Book1 Group - todos los derechos reservados.
El contenido de este sitio no se puede copiar o usar, ni en parte ni en su totalidad, sin el permiso escrito del propietario.
Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)