El niño al que le encanta lamer el viento

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Título original:

The Boy Who Loves to Lick the Wind

Contenido del libro:

Al niño de al lado le encanta lamer el viento.

«Deberías probarlo», dice su madre. «Los mejores vientos están en la playa. »

Y así empieza una tarde increíble junto al mar para dos niños. A uno no siempre habla con palabras y le gusta tirar piedras; al otro, recoger conchas y hacer castillos de arena. Pero el mar hace su magia y al final del día los niños descubren que a los dos les encanta lamer el viento, juntos.

Una conmovedora historia de amistad, narrada e ilustrada con calidez y empatía.

¿Has pasado alguna vez un día en la playa con un amigo?

¿O en cualquier otro lugar en el que te guste estar?

Los dos niños de esta historia se lo pasan muy bien juntos, chapoteando y girando, bailando y gritando y, por supuesto, ¡lamiendo el viento!

Así como los niños parecen diferentes (uno tiene el pelo oscuro y el otro rubio, por ejemplo), y ellos

(a uno le gusta construir castillos y el otro prefiere tirar piedras al mar), sus cerebros son diferentes.

mar)-, sus cerebros también son diferentes. Pero no podemos ver esa diferencia.

El niño de al lado es autista, lo que significa que ve, oye, entiende e interactúa con el mundo de forma diferente. A menudo lleva protectores auditivos porque algunos ruidos pueden dañarle los oídos. No siempre utiliza palabras para comunicarse, pero tiene otras formas de decirnos cómo se siente,

Amistad inclusiva: La historia gira en torno a dos chicos con características e intereses distintos, destacando la belleza de la amistad que trasciende las diferencias.

Exploración de la neurodiversidad: Introduce el concepto de neurodiversidad al retratar a uno de los chicos como autista, destacando que el cerebro de cada uno funciona de forma única, incluso si esas diferencias no son inmediatamente visibles.

Sensibilidad sensorial: El uso de protectores auditivos por parte del niño autista refleja su sensibilidad a determinados sonidos, lo que permite comprender mejor las dificultades a las que se enfrentan las personas con sensibilidad sensorial.

Comunicación más allá de las palabras: La narración muestra que la comunicación va más allá del lenguaje verbal, ya que el niño autista se expresa a través de medios alternativos, y su amigo aprende con entusiasmo este «lenguaje especial.»

Fomentar la comprensión: La historia anima a los lectores a abrazar la diversidad abordando la posible familiaridad con el autismo o introduciendo el concepto por primera vez, fomentando un sentido de curiosidad y comprensión sobre las diferentes formas de experimentar el mundo.