The Automotive Gray Market: An Inside History
En la década de 1970, cuando los entusiastas de los coches en Estados Unidos se aburrían de los modelos fabricados bajo unas normas de contaminación y seguridad cada vez más estrictas, algunos concesionarios innovadores aprovecharon una laguna legal -diseñada para permitir a los soldados y diplomáticos estadounidenses regresar del extranjero con sus vehículos- para importar coches exóticos nunca destinados a la venta en Estados Unidos. En la década de 1980, el aumento del valor del dólar convirtió la compra de coches en Europa en el sueño de cualquier cazador de gangas.
Surgió una red de importadores no autorizados del «mercado gris» y talleres de transformación, que eludían los canales de fábrica y adaptaban los coches para que cumplieran la normativa estadounidense y las normas de emisiones, al menos en teoría. Estos coches tenían que pasar por la aduana estadounidense, un sistema equipado para gestionar sólo unas pocas importaciones independientes al año.
Con el aumento de las solicitudes, el sistema normativo se vino abajo. Esta es la historia de un periodo incomprendido pero fascinante de la industria automovilística, en el que importadores creativos encontraron la forma de poner a los automovilistas estadounidenses en Ferraris nuevos mientras la EPA y el DOT se veían desbordados por montones de papeleo.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)