El juicio por crímenes de guerra de Jabárovsk: Desenterrar la guerra biológica en la Segunda Guerra Mundial

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Título original:

The Khabarovsk War Crimes Trial: Unearthing Biological Warfare in WWII

Contenido del libro:

3607 miembros de la Unidad 731, 12 juzgados en Khabarovsk. ¿Prevalecía la justicia?

Aunque Occidente a menudo desestimó el Juicio de los Crímenes de Guerra de Jabárovsk por considerarlo "propaganda comunista", fue la primera vez que los científicos del "Departamento de Prevención de Epidemias y Purificación del Agua" del Ejército Imperial Japonés (IJA) dieron a conocer los crímenes que cometieron durante la Segunda Guerra Mundial. Los Juicios por Crímenes de Guerra de Jabarovsk fueron audiencias celebradas entre el 25 y el 31 de diciembre de 1949 en los tribunales estalinistas de la Unión Soviética, y duraron cinco días. Fue posterior a los juicios de Núremberg, que duraron 10 meses, y al Tribunal de Crímenes de Guerra del Lejano Oriente de Tokio, que duró dos años. Aunque fue un juicio por crímenes de guerra más breve, desenterró crueles prácticas de desarrollo de armas biológicas y experimentación humana por parte del Ejército Imperial Japonés. Este libro contiene confesiones de los científicos que trabajaron en la Unidad 100 y la Unidad 731 sobre sus funciones. He aquí un ejemplo del interrogatorio documentado.

"A principios de septiembre de 1944, un gendarme mató a tiros en mi presencia a dos rusos en el cementerio de ganado y los enterró allí. Esto se hizo

por orden del Teniente Nakazima. Fueron fusilados porque no se podían realizar más experimentos con ellos en vista de su estado de agotamiento y de que no eran aptos para seguir experimentando".

Otro testimonio,

"... A mediados de 1942 se llevó a cabo una expedición contra las tropas chinas, con el general Ishii al mando..... Como paso previo a esta expedición, se prepararon 130 kilogramos de bacterias paratifoideas y de ántrax bajo mi dirección, también por orden del comandante Suzuki. Según mis informaciones, en esta expedición también se utilizaron pulgas como portadoras de epidemias.... Para llevar a cabo la expedición, el general Ishii partió con un grupo hacia China Central, donde las tropas japonesas se retiraban en ese momento. Los miembros de la expedición aprovecharon la retirada para diseminar bacterias en el territorio abandonado con el fin de provocar brotes epidémicos entre las tropas chinas que avanzaban".

Este libro contendrá no sólo los testimonios de los acusados en los interrogatorios, sino también los de los testigos y sus compañeros de la Unidad 731 y la Unidad 100. Desvela su experimentación en los campos de pruebas ANTA donde probaban nuevas armas, la experimentación humana, la causa del brote de peste bubónica en China, así como los ataques con ántrax y muermo en Rusia.