El Hombre de Arena

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Título original:

The Sandman

Contenido del libro:

Los técnicos estaban sentados frente al panel de control del ordenador central cuando lo oyeron. En lo más profundo de las instalaciones nucleares subterráneas, tres explosiones sacudieron el complejo, arrojando a todo el mundo violentamente contra sus mesas y contra el suelo.

La impresora se encendió y salieron hojas de papel con palabras mecanografiadas a una velocidad increíble. Un hombre corre hacia la impresora y coge los papeles. "¿Qué leen? "preguntó el Dr.

Balim.

Había un toque de desesperación en su tono. El técnico se tragó el creciente nudo en la garganta y levantó lentamente los ojos para mirar al doctor.

"El sistema de refrigeración de emergencia del núcleo se ha desconectado". El jadeo repentino de los presentes fue ensordecedor. "¿Qué está pasando aquí? "preguntó el coronel Benghazi.

"Dios mío... Es él", dijo el capitán Mourak, que estaba detrás de él. "¿Puede ser más específico? "El coronel Benghazi se impacientaba.

"Es el saboteador, tonto" En la Instalación de Investigación Nuclear Bushehr de Irán comienza la cuenta atrás para el desastre nuclear cuando el principal saboteador de la C. I.

A. con nombre en clave: Sandman da un golpe devastador. En las profundidades de la instalación subterránea, un voraz incendio ha destruido el sistema de refrigeración y amenaza con provocar la fusión del núcleo del reactor.

Para salvar el reactor, los iraníes deben volver a poner en marcha el refrigerante...

Pero Sandman se ha atrincherado en la sala de control secundaria alternativa para evitarlo... Así, un brillante oficial del ejército toma el mando y está dispuesto a hacer lo que sea necesario para evitar el desastre. La situación se convierte rápidamente en un duelo de ingenio, ya que Sandman se defiende en mortíferos tiroteos contra los soldados que intentan retomar la sala de control...

Y a medida que avanza el reloj, no sólo pierde tiempo para escapar, sino que la temperatura del núcleo del reactor aumenta rápidamente... y cada segundo que pasa les acerca más al desastre nuclear.