El ejército del abuelo: Voluntarios defendiendo las Islas Británicas en la Primera Guerra Mundial

Título original:

Grandad's Army: Volunteers Defending the British Isles in the First World War

Contenido del libro:

En agosto de 1914, al estallar la Primera Guerra Mundial, se ejerció una enorme presión sobre los hombres para que se alistaran en los Nuevos Ejércitos de Kitchener, que complementaban al diminuto ejército regular y a la Fuerza Territorial. Esta presión era intensa, y los carteles, las súplicas de los dignatarios locales y una dispersión aparentemente indiscriminada de plumas blancas exacerbaron la sensibilidad masculina.

Todos estamos familiarizados, aunque sólo sea a través del programa de televisión de la BBC «Dad's Army», con la Guardia Nacional de la Segunda Guerra Mundial. Mucho menos se sabe de su equivalente en la Primera Guerra Mundial: el Cuerpo de Entrenamiento de Voluntarios (VTC). Al igual que sus homólogos de la Segunda Guerra Mundial, el VTC estaba formado por aquellos que eran demasiado viejos, demasiado jóvenes, demasiado incapaces o demasiado indispensables para servir en las fuerzas regulares.

Lucharon por el derecho a estar armados, uniformados y entrenados; a ser empleados en tareas significativas; y al principio, a existir. Este libro explora los orígenes, el desarrollo y la estructura de las VTC, junto con los miembros de las numerosas organizaciones médicas, de transporte, policiales y juveniles de apoyo que mantuvieron encendidas las hogueras domésticas o, en algunos casos, intentaron apagarlas.

El VTC surgió de la necesidad de aquellos hombres que se veían obligados a quedarse en casa de que se viera que estaban aportando su granito de arena. Vieron el traslado del grueso del ejército regular y de las Fuerzas Territoriales al Frente Occidental como una oportunidad de prepararse para resistir la esperada invasión alemana de Gran Bretaña, y como una forma de contrarrestar las acusaciones de evasión, o incluso de cobardía.