El atlas de la reducción de conflictos: Una guía de campo de Montana para compartir los paisajes ganaderos con la vida silvestre

Título original:

The Atlas of Conflict Reduction: A Montana Field-Guide to Sharing Ranching Landscapes with Wildlife

Contenido del libro:

El libro es un relato de primera mano del viaje de la Dra. Hannah Jaicks a través de los paisajes ganaderos del oeste de Montana para mostrar las historias de ganaderos y grupos afiliados que son pioneros en estrategias para reducir los conflictos con la fauna salvaje, a la vez que administran el paisaje. Los estadounidenses dependen de estas personas que viven del trabajo de la tierra. Los ganaderos tienen el poder de forjar el futuro de nuestras tierras, vías fluviales y comunidades de vida silvestre, pero las percepciones arraigadas enmarcan la ganadería como una fuerza unilateralmente destructiva para el medio ambiente. Sin embargo, la percepción es un terreno resbaladizo en el que basar un argumento, y la realidad es mucho más complicada. A menudo considerados antitéticos, los ganaderos estadounidenses y la vida salvaje llevan mucho tiempo enredados. El libro trata de los productores y organizaciones asociadas que están forjando nuevos caminos en la conservación y abordando estos enredos aparentemente insolubles para mantener las operaciones de los ranchos de trabajo junto con poblaciones sanas de vida silvestre. Eleva las voces de estas personas que se esfuerzan a diario por conseguir paisajes salvajes y de trabajo en el Oeste y sirve de modelo para que otros puedan empezar a hacer lo mismo.

En cada capítulo, el autor lleva a los lectores de viaje por el oeste de Montana hasta un valle diferente y presenta las historias de héroes de la conservación que practican la ganadería regenerativa, ofrecen productos agrícolas cultivados de forma consciente, promueven estrategias de conservación colaborativa y protegen hábitats vitales para la fauna endémica que, de otro modo, se urbanizarían y subdividirían sin remedio. La narración etnográfica se entrelaza con teorías psicológicas para informar a los lectores sobre formas progresistas de hacer del mundo que compartimos -con personas y animales- un lugar mejor para vivir. El texto va acompañado de ilustraciones de Katie Christiansen sobre la vida salvaje y las herramientas de reducción de conflictos, que ayudan a subrayar la vívida realidad de los paisajes compartidos y cómo se consiguen.

No cabe duda de que la historia de la ganadería está plagada de ejemplos problemáticos, y de que los pastizales públicos y privados no están hoy universalmente en buenas condiciones. Este libro pretende reflejar el creciente reconocimiento de que las buenas prácticas ganaderas coinciden con buenas medidas de gestión de la tierra y la fauna, pero los ganaderos necesitan ayuda. Si queremos que esta extraordinaria labor siga adelante, los ecologistas y los ciudadanos preocupados por el medio ambiente deben dar un paso al frente y garantizar que estas prácticas no sólo sean posibles, sino que se conviertan en la norma. Todo el mundo debe estar dispuesto a sentarse a la mesa y participar en debates sobre cómo trabajar juntos de forma más eficaz y colaborativa. Este libro es una hoja de ruta para empezar a hacerlo.