Donde ardió el río: Carl Stokes y la lucha por salvar Cleveland

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Título original:

Where the River Burned: Carl Stokes and the Struggle to Save Cleveland

Contenido del libro:

En la década de 1960, Cleveland sufrió la violencia racial, el aumento de los índices de delincuencia y la disminución de la base impositiva, a medida que la ciudad perdía empleo y población. Las ratas infestaban un gueto en expansión y decadencia, el lago Erie parecía agonizar y la peligrosa contaminación atmosférica se cernía sobre la ciudad.

Así era la crisis urbana en el error del lago. Cuando el río Cuyahoga se incendió en el verano de 1969, la ciudad estaba en su nadir, contaminada y empobrecida, luchando por fijar un nuevo rumbo. El río en llamas se convirtió en el emblema de todo lo que iba mal en el entorno urbano de Cleveland y de toda la América industrial.

Carl Stokes, el primer alcalde afroamericano de una gran ciudad estadounidense, había llegado al cargo en Cleveland un año antes con energía e ideas. Se rodeó de un equipo con talento y su administración estableció nuevas políticas para combatir la contaminación, mejorar la vivienda, ofrecer oportunidades recreativas e impulsar el desarrollo del centro de la ciudad. En Where the River Burned, David Stradling y Richard Stradling describen la incipiente transición de Cleveland de ciudad industrial contaminada a ciudad de servicios viable durante el gobierno de Stokes.

La historia culmina con el primer Día de la Tierra en 1970, cuando una amplia participación ciudadana marcó un nuevo compromiso con la creación de una ciudad más limpia, saludable y atractiva. Aunque preocupado principalmente por abordar la pobreza y la desigualdad, Stokes comprendió que la transición de la ciudad industrial a la ciudad de servicios requería inversiones masivas en el paisaje urbano. Stokes adoptó un pensamiento ecológico que hacía hincapié en la conexión de los problemas sociales y medioambientales y en la necesidad de soluciones regionales.

Fue alcalde durante dos mandatos, pero en sus cuatro años de mandato el progreso de Cleveland no estuvo a la altura de los objetivos de su administración. Aunque era muy consciente de los persistentes límites raciales y políticos que frenaban a su ciudad, Stokes se adelantó en muchos aspectos a su tiempo en su visión de Cleveland y de una América urbana más habitable.