Dinastía del Sur Profundo: Los Bankheads de Alabama

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Título original:

Deep South Dynasty: The Bankheads of Alabama

Contenido del libro:

Ganador del premio Michael V. R. Thomason de la Gulf South Historical Association.

La arrolladora historia de una ambiciosa y antaño poderosa familia sureña.

Desde la Reconstrucción hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, los Bankhead fueron los principales arquitectos del entramado político, económico y cultural de Alabama y de todo el Sur. Como familia, desempeñaron un papel decisivo en la configuración del Nuevo Sur y de la economía política estadounidense del siglo XX, pero en la actualidad el apellido Bankhead sólo se asocia a nombres de lugares..

Dinastía del Sur profundo: Los Bankhead de Alabama es una biografía familiar épica, profundamente documentada, que refleja el complicado y cambiante mundo habitado por tres generaciones de la extremadamente exitosa -aunque problemática- familia Bankhead del noroeste de Alabama. El experto relato de Kari Frederickson recorre las carreras de cinco miembros de la familia: John Hollis Bankhead; sus hijos, John Hollis Bankhead Jr. y William Brockman Bankhead; su hija, Marie Bankhead Owen; y su nieta, Tallulah Brockman Bankhead.

Veterano de la Confederación e hijo de un esclavista, John Hollis Bankhead ocupó cargos políticos casi ininterrumpidamente desde 1865 hasta su muerte en 1920, primero en puestos estatales y finalmente en el Congreso -en la Cámara de Representantes y luego en el Senado- durante treinta y tres años. Dos de sus tres hijos, John Jr. y William, siguieron los pasos políticos de su padre. John Jr., un exitoso abogado de empresa, fue elegido para la legislatura estatal y luego para el Senado de EE.UU. en 1930; William fue elegido para la Cámara de Representantes en 1916 y elegido Presidente de la Cámara en 1936. Juntos, padre e hijos, desempeñaron un papel clave en la creación y el mantenimiento de una cultura política, un código legal y un sistema económico conservadores que facilitaron las oportunidades económicas de los cultivadores de algodón, los barones del carbón y las industrias emergentes en Alabama y en todo el Sur, al tiempo que perpetuaban la supremacía blanca. La hija Marie Bankhead Owen amplió el poder cultural de la familia durante sus treinta y cinco años como directora del Departamento de Archivos e Historia de Alabama. Desde este cargo y a través de su trabajo con grupos como las Hijas Unidas de la Confederación, adoptó y difundió una narrativa histórica impregnada de la mitología de la Causa Perdida que validaba el poder y el privilegio de las élites blancas y naturalizaba la condición de segunda clase de los afroamericanos.

La hija de William, la actriz Tallulah Bankhead, se benefició del rico linaje político de su familia y, a su vez, les dio un toque de glamour e hizo modernos a los Bankhead. El examen meticulosamente investigado que Frederickson hace de esta familia sureña, antaño poderosa pero ahora en gran parte olvidada, es una historia amplia y compleja de la región y de su relación con el resto del mundo a lo largo de ocho décadas, desde los escombros de la Guerra Civil hasta los albores de la era nuclear.