Tearing Down Walls: Ich Bin Ein Berliner
Como Berlín, todos tenemos un muro, un muro interior, que hay que derribar. Es un muro que construimos a una edad temprana, cuando empezó la socialización y necesitábamos una barrera tras la que ocultar esa parte de nosotros mismos que resultaba inaceptable para nuestras madres, así como para otras personas importantes. Lo que escondemos es la «sombra». Para ocultarla, creamos un muro al que llamamos «persona». «
Ser berlinés es empezar como un todo unificado, como empezamos todos de niños, como empezó Berlín. Luego se divide en dos y se levanta un muro entre las dos partes, como era Berlín y como éramos todos cuando empezó la socialización, rompiendo nuestra totalidad original.
Por último, debe volver a ser uno, como lo fue Berlín y como esperamos ser nosotros, si hacemos nuestro trabajo y tenemos suerte. Como en el caso de Berlín, el muro nos impide llegar a ser todo lo que podemos ser. Berlín, por tanto, es una metáfora de la ampliación de la personalidad que puede producirse cuando nosotros, como los habitantes de Berlín, derribamos ese muro y nos hacemos más grandes, más ricos, más libres y más diversos y democráticos. En este sentido, todos somos potencialmente berlineses.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)