Deporte, empleo e impuestos: El impacto económico de los equipos y estadios deportivos

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Título original:

Sports, Jobs, and Taxes: The Economic Impact of Sports Teams and Stadiums

Contenido del libro:

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Estados Unidos se encuentra en pleno auge de la construcción de instalaciones deportivas. Los equipos deportivos profesionales exigen y obtienen nuevas y lujosas instalaciones de juego fuertemente subvencionadas por el gobierno. En muchos casos, la justificación que se da a estas subvenciones es que atraer o mantener una franquicia deportiva profesional -incluso un equipo de béisbol de ligas menores o unas instalaciones de entrenamiento de pretemporada de las grandes ligas- se amortiza con creces con el aumento de los ingresos fiscales, el desarrollo económico local y la creación de empleo.

Pero, ¿son ciertas estas afirmaciones? Para evaluar los argumentos a favor de las subvenciones, este libro examina el impacto económico de los nuevos estadios y la presencia de una franquicia deportiva en la economía local. En primer lugar, explora cuestiones generales como el método adecuado para medir los beneficios y costes económicos, el origen del poder de negociación de los equipos para obtener subvenciones de las administraciones locales, la política local de atracción y retención de equipos, la relación entre el deporte y el empleo local, y la importancia del diseño del estadio para influir en el impacto económico de una instalación.

La segunda parte del libro contiene estudios de casos de instalaciones deportivas de grandes ligas en Baltimore, Chicago, Cincinnati, Cleveland, Indianápolis, San Francisco y las Ciudades Gemelas, y de estadios de ligas menores e instalaciones de entrenamiento de primavera en béisbol. Las principales conclusiones son las siguientes: en primer lugar, los equipos e instalaciones deportivas no son una fuente de crecimiento económico y empleo local; en segundo lugar, la magnitud de la subvención neta supera el beneficio financiero de un nuevo estadio para un equipo; y, en tercer lugar, las razones más plausibles por las que las ciudades están dispuestas a subvencionar a los equipos deportivos son la intensa popularidad de los deportes entre una proporción sustancial de votantes y empresas y la influencia que los equipos disfrutan de la posición de monopolio de las ligas deportivas profesionales.

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