De la Gracia a la Gloria, un Viaje Ascendente

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Título original:

From Grace to Glory, an Upward Journey

Contenido del libro:

Este es un devocional acerca de cómo Yeshua (Jesús) usa nuestro quebrantamiento para su Gloria, escrito por un hombre que ha experimentado graves quebrantamientos desde su infancia. Citas del libro: "Tu viaje por este mundo será desconcertante, y harás bien en recordar que no eres más que una de sus muchas piezas rotas. Contempla y no te lamentes de tu rotura, porque ahí reside tu belleza". "Hay momentos en que nosotros, como creyentes, recordamos los momentos más dolorosos y pensamos que no hay manera de que YHWH pueda hacer uso de ellos, o que algunas de nuestras experiencias más vergonzosas son demasiado vergonzosas para el Mesías. Es aquí donde debemos recordar el amor del Mesías por nosotros y cómo Él puede tomar el más vergonzoso de los hedores y convertirlo en el más dulce de los olores; un aroma que invita y vigoriza." "Dios Todopoderoso puede convertir tus quemaduras en una bendición.

Él puede usar tu historia para su gloria, mientras se añade a la llama de la Iglesia". "No importa la fractura, Yeshua debe ser siempre el denominador común". "La conclusión es que cuanto más insistamos en permanecer desconectados con lo que somos, más tiempo permaneceremos desconectados con los que nos rodean." "Cuanto mayor sea tu oquedad, mayor facilidad tendrán los vientos huracanados para desviarte del camino." "El camino hacia la Gloria requiere una muerte diaria, mientras que el camino hacia la autogloria termina en la muerte". "De la misma manera que el Mesías extendió su cuerpo roto a sus discípulos en el Cenáculo, nosotros debemos extender el nuestro al mundo, y además sin vergüenza." "Incluso el cristiano bienintencionado puede equivocarse al acercarse a un alma que sufre con la intención de arreglar lo que obviamente es un vaso roto. En primer lugar, recuerda siempre que no hay nada que podamos hacer para arreglar a nadie, porque nosotros no somos los fabricantes. Sólo nuestro Dios puede arreglar a su pueblo, y el Padre lo hizo posible enviando a su Hijo, Yeshua Mesías, a sangrar en la cruz. La sangre del Mesías es la única pasta capaz de unir permanentemente lo roto, sin importar el tamaño o la condición. Y es el Espíritu Santo quien sella lo que el Mesías ha sanado.

Todos los demás intentos de arreglo se parecen a una pieza de cerámica rota cuyas piezas se mantienen unidas con cinta adhesiva; un pequeño paso en falso y ...." "A menudo miramos un vaso que tiene varias grietas; un vaso que parece que se va a romper en cualquier momento .... Afortunadamente, nuestro Dios está mirando simultáneamente el presente cristal agrietado, así como el diamante centelleante, pulido y brillante, que se le presentará en un futuro próximo.... En lugar de juzgar basándonos en lo que podemos o no podemos ver, deberíamos dedicar nuestro tiempo a ayudar a pulirlo".