Danzas de Bélgica

Título original:

Dances of Belgium

Contenido del libro:

Tras la presentación de un gallo de Berbería al alcalde de algunas ciudades valonas, se decapita al desafortunado pájaro y la gente baila a su alrededor: una extraña ceremonia ritual, cuyo análogo se conoce también en los Pirineos y en España. Esta y muchas otras costumbres ancestrales se han mantenido vivas en todo el sur y el este de Bélgica gracias a la gran afición de la gente a bailar, en la plaza, en los andenes y en los cafés. También en Flandes pervive el baile tradicional. Su vínculo con el pasado se aprecia, en particular, con las Danzas de la Espada, por las que fue tan famosa. La historia registra su ejecución en la pintoresca ciudad de Brujas ya en 1389, y en la región de Amberes los hombres siguen bailando "Los Traweiteldans" con el acompañamiento de un redoble de tambor.

M. Pinon era un experto en canciones folclóricas, pero las insistentes peticiones de todo el país le llevaron a estudiar el baile folclórico. M. Jamar presumía de haber estudiado durante veinticinco años su Flandes natal. Al igual que su colaborador, era miembro de la Comisión Nacional Belga de Folclore.

Su libro contiene música y anotaciones de pasos para cinco danzas y hay, además, cuatro láminas en color que muestran los trajes correctos que deben llevarse.