Confesiones de Narciso

Título original:

Confessions of Narcissus

Contenido del libro:

Una reflexión sobre la autoridad y sus limitaciones, sobre lo que creemos saber y los espacios intermedios.

En Confesiones de Narciso, Scully sugiere que nuestra exigencia de coherencia narrativa es una de las cosas que hace que nuestras vidas sean tan difíciles de soportar, que cuando William Hazlitt declaró: «Somos nosotros los que somos Hamlet», nos estaba diciendo algo sobre la universalidad de Shakespeare que merece la pena considerar: Hamlet no sólo da voz a nuestros propios miedos y ansiedades, sino que también los llama a la existencia. En el proceso de intentar encontrar curas para nosotros mismos, es decir, nos convertimos en creadores, hasta cierto punto, de nuestras propias desgracias. Confesiones de Narciso parte de la idea de que las historias son lo que necesitamos y también (en parte) lo que sufrimos.

En esta serie de observaciones y aforismos sobre la literatura y la vida, Scully defiende que la incertidumbre no es una dolencia que necesariamente debamos intentar superar. Siguiendo la tradición de Keats y otros, la incertidumbre puede ser algo por lo que tengamos buenas razones para sentir más curiosidad, que la incertidumbre tiene mérito artístico y es un estado del ser que incluso podríamos llegar a disfrutar.