Vladimir Solovyev's Lectures on Godmanhood
Estas conferencias, pronunciadas por Solovyov en San Petersburgo en 1878, marcan un momento seminal no sólo en la filosofía rusa, sino también en la mundial.
Entre el público se encontraban Dostoievski, Tolstoi y otras luminarias. Todos reconocieron que había ocurrido algo asombroso.
El joven filósofo, místico y visionario Solovyov había dado una expresión intelectual inesperadamente concisa a la realidad de la evolución de la conciencia y la religión. Había hablado conmovedoramente de la actualización de la Humanidad Divina en la eternidad y en el tiempo, del mundo divino y de la caída de los seres espirituales en el pecado, del origen y significado del mundo natural, y de la encarnación de Cristo, que conduce a la redención de los mundos visible e invisible en la plena revelación de la Humanidad Divina. Sophia, a quien Solovyov experimentó tres veces en su vida, inspira esta gran obra.
Concibe a Sophia de diversas maneras: como el prototipo ideal eterno de la humanidad, como el alma del mundo activamente comprometida en la actualización de esta idea, y como el ser divino-humano plenamente desarrollado. Esta Sophia es a la vez el principio activo en el proceso de la creación y su meta realizada: el reino de Dios.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)