Comida para pensar: Más comida casera

Título original:

Food for Thought: More Home Cooking

Contenido del libro:

Este libro está destinado a aquellas amas de casa y cocineros que deseen saber cómo hacer los platos más sanos y sabrosos al menor coste posible. En cocina debe recordarse este hecho por encima de todos los demás.

UNA BUENA COCINERA NUNCA DESPERDICIA.

Es su orgullo aprovechar al máximo todo lo que se le confía en forma de alimentos.

Y su placer es servirlo de la forma más apetitosa. De ninguna otra manera puede demostrar su excelencia.

Porque los malos cocineros son siempre derrochadores y extravagantes. Las amas de casa pueden hacer de este libro una guía para aquellas de sus cocineras que estén dispuestas a aprender nuevos y buenos métodos de cocinar alimentos familiares.

Para que no se diga que se da una preferencia indebida a las formas extranjeras de cocinar, la autora ruega a sus lectores que recuerden que gran parte del éxito de cualquier plato depende de su sabor.

Si tiene buen sabor y está bien condimentado, los comensales no critican sus componentes. Es justo ahí donde se obtiene el beneficio de la habilidad culinaria europea.

El uso juicioso de unas pocas hierbas dulces baratas y de salsas sabrosas elevará la excelencia gustativa de una guarnición, hecha con el corte de carne más barato, muy por encima de un filete de buey mal cocinado o de un asado grande pero mal condimentado.

Dado que el arte de utilizar cada parte de los alimentos es eminentemente francés, el plan de la ESCUELA DE COCINA DE NUEVA YORK ha consistido en adaptar el ahorro extranjero al uso de la cocina doméstica.

Proporcionar lo suficiente en cada comida.

Cocinar y servir de manera que invite al apetito.

Hacer un plato bonito y agradable con los materiales que el cocinero medio regalaría en la puerta o tiraría a la basura.

Todos estos son logros que nuestras esposas e hijas americanas estarán encantadas de aprender de sus hermanas europeas.