Casados con la tierra: Historias de una vida sencilla en una granja de fruta ecológica

Título original:

Wedded to the Land: Stories from a Simple Life on an Organic Fruit Farm

Contenido del libro:

«La prosa sensual de Joan Donaldson brilla y sorprende, ya sea cuando escribe sobre el staccato de un pájaro carpintero peludo que resuena en el bosque, cuando extrae savia dulce de un grupo de arces durante un ritual de azucarado en primavera o cuando llora la pérdida de su buey, Tolstoi. Su colección de ensayos, Wedded to the Land, pela la piel de su granja de arándanos con la precisión y elocuencia de un Wendell Berry, Edward Abbey y otros ensayistas agrarios que nos hacen suspirar por el corazón perdido del país».

--George Getschow, escritor residente en el Mayborn Graduate Institute of Journalism, ex redactor del Wall Street Journal.

John pensaba que estaba construyendo un garaje cuando levantó un edificio de entramado de madera a un tiro de piedra de la casa que construimos en la parte trasera de nuestra granja. Mientras fregaba los platos, pensaba en lo agradable que sería mirar por la ventana de la cocina y ver a las cabras descansar en un prado. Si las cabras vivieran en el nuevo cobertizo, el paseo no estaría lejos cuando se ordeñara en invierno o durante la época de partos.

Una vez fuera, escudriñé el armazón de dieciséis por veinte pies. «Aquí cabrían bien un par de cabras. Hay sitio para dos establos». El martillo de John se detuvo. Yo continué. «Los álamos temblones y la madreselva del norte darían cobijo a un corral exterior». Me até un delantal de clavos y cogí un martillo.