Cancel This Book: El caso progresista contra la cultura de la cancelación

Título original:

Cancel This Book: The Progressive Case Against Cancel Culture

Contenido del libro:

Al examinar un fenómeno que se está extendiendo por todo el país, Cancel This Book pone de relieve la supresión del debate abierto y sincero.

La vergüenza pública de las personas por ofensas reales o percibidas, a menudo contra las nociones emergentes de normas y relaciones raciales y de género adecuadas, se ha convertido en algo habitual. En muchos casos, la humillación va acompañada de peticiones para que los infractores pierdan sus empleos, cargos u otros estatus. Con frecuencia, las personas que son objeto de "cancelación" simplemente desconocen las normas más recientes y cambiantes (a menudo relacionadas con el lenguaje) que se les acusa de transgredir, o tienen preguntas sinceras sobre cuestiones que se han considerado prohibidas para el debate y la discusión.

Cancel This Book ofrece una perspectiva única de Dan Kovalik, un autor progresista que apoya los movimientos en curso por la igualdad y la justicia racial y de género, pero que está preocupado por la prevalencia de la "cancelación" de personas, y especialmente de personas bienintencionadas y que a su vez están aliadas con estos movimientos.

Mientras que muchos progresistas creen que "cancelar" a otros es una forma de activismo y de responsabilizar a los demás, Cancel This Book sostiene que la "cancelación" es a menudo contraproducente y destructiva de los mismos valores que los "canceladores" dicen apoyar. Y, de hecho, ahora vemos casos en el lugar de trabajo en los que los empresarios están utilizando este espíritu de "cancelación" para enfrentar a los empleados entre sí, para ejercer más control sobre la mano de obra y para socavar la solidaridad obrera y laboral.

Kovalik observa que muchos progresistas se oponen discretamente a esta "cultura de la cancelación" y a muchos casos de "cancelación" de los que son testigos, pero temen airear públicamente estas preocupaciones para no ser ellos mismos "cancelados". El resultado es la supresión del debate abierto sobre temas importantes relacionados con cuestiones raciales y de género, e incluso sobre cuestiones relacionadas con la mejor manera de hacer frente a la actual pandemia de COVID-19. Mientras la gente habla en susurros sobre sus verdaderos sentimientos acerca de estas cuestiones, se evitan el debate y la discusión críticos, se acumulan los resentimientos y, en última instancia, se perjudica al movimiento por la justicia y la igualdad.