Border Walls Gone Green: Naturaleza y política antiinmigración en Estados Unidos

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Título original:

Border Walls Gone Green: Nature and Anti-Immigrant Politics in America

Contenido del libro:

¿Cómo es posible que los autodenominados progresistas medioambientales de Estados Unidos se opongan a las políticas liberalizadoras de la inmigración? Generalmente se supone que el ecologismo es un compromiso de la izquierda política y el restriccionismo un compromiso de la derecha. Como muestra John Hultgren, la realidad es bastante más complicada. Los ecologistas estadounidenses han apoyado las restricciones a la inmigración desde que se inició el movimiento a finales del siglo XIX, y los argumentos contrarios a la inmigración siguen atrayendo adeptos entre la corriente dominante contemporánea y los "verdes" radicales.

Border Walls Gone Green trata de explicar estos compromisos aparentemente paradójicos examinando lo que está ocurriendo realmente en los debates estadounidenses sobre las repercusiones medioambientales de la inmigración. Argumenta que la naturaleza se utiliza cada vez más como una forma de "amurallamiento" que permite a los restriccionistas fortificar sutilmente las fronteras e identidades territoriales sin tener que recurrir a lógicas culturales y raciales que resultan desagradables para la izquierda política. Desde un punto de vista medioambiental, la ubicación de las fronteras tiene poco sentido; el paisaje mexicano cercano a la mayoría de los pasos fronterizos es exactamente igual al paisaje del lado estadounidense. Y la creencia de que los inmigrantes consumen de algún modo los recursos naturales del país, acelerando así la degradación del medio ambiente, no se sostiene. Así pues, Hultgren concluye que los esfuerzos bienintencionados de los ecologistas por "sostener" América también están sosteniendo la idea del Estado-nación y, de hecho, sirven para reforzar formas excluyentes de comunidad política.

¿Cómo deben actuar entonces los ecologistas con conciencia social? Hultgren demuestra que prestar atención a las realidades de la migración transnacional puede conducir a un tipo diferente de activismo socioecológico, que podría ser nuestra única oportunidad de enfrentarnos eficazmente a las poderosas fuerzas que producen la devastación ecológica y la injusticia social.