Body Dump: Kendall Francois, el asesino en serie de Poughkeepsie

Opiniones de los lectores

El libro «Body Dump» de Fred Rosen profundiza en los crímenes del asesino en serie Kendall L. Francois, explorando los fallos de las fuerzas del orden y los inquietantes detalles que rodean sus crímenes. Mientras que algunos lectores encontraron el libro atractivo e informativo, otros lo criticaron por la calidad de su escritura y las inexactitudes de los hechos.

El libro ofrece una visión interesante de la vida de Kendall Francois y de los fallos de las fuerzas del orden a la hora de atraparlo. Presenta detalles cautivadores sobre el caso y su contexto, e incluye 16 páginas de fotografías de las víctimas, lo que algunos lectores apreciaron. A muchos lectores les pareció atractivo y de lectura rápida, sobre todo para los aficionados a la novela policíaca.

Varios lectores señalaron problemas con el estilo de redacción, que calificaron de pobre y molesto. Hubo quejas sobre inexactitudes factuales y falta de profundidad sobre los antecedentes y la vida familiar de Kendall. A algunos el libro les pareció tedioso y árido, lo que les impidió terminarlo.

(basado en 31 opiniones de lectores)

Título original:

Body Dump: Kendall Francois, the Poughkeepsie Serial Killer

Contenido del libro:

La historia de un asesino en serie del norte del estado de Nueva York que secuestraba, violaba y asesinaba a mujeres y escondía sus cadáveres en su casa.

A finales de la década de 1990, en Poughkeepsie, Nueva York, empezaron a desaparecer prostitutas de las calles de la antigua ciudad del río Hudson. Debido al estilo de vida nómada de las mujeres, que mucha gente condenaba, pocos en la ciudad se dieron cuenta de que habían desaparecido, aparte de sus familias y el teniente Bill Siegrist, que sospechaba que un asesino en serie estaba detrás de las desapariciones. Las prostitutas de la zona describieron a un hombre extraño que merodeaba por los alrededores, lo que llevó a Siegrist hasta Kendall Francois, un vigilante de pasillo de la escuela secundaria, desaliñado y con sobrepeso, apodado Stinky. La policía sometió a Francois al detector de mentiras, que superó con éxito, y se vio obligada a liberarlo. Las mujeres de la zona siguieron desapareciendo.

En un sorprendente giro del destino, Francois fue finalmente detenido cuando una mujer a la que había violado consiguió escapar de su casa y se topó con un control de carretera montado por Siegrist. La mujer condujo a la policía hasta la casa de Francois, y el vigilante no tardó en confesar y llegar a un acuerdo con la fiscalía. Para entonces, los policías con trajes de Tyvek ya habían encontrado ocho cadáveres ocultos en el desván y el sótano de la casa de los horrores de Francois. Una de las víctimas sigue desaparecida.

Del autor de numerosos libros sobre crímenes reales, entre ellos Lobster Boy y Deacon of Death, ésta es la aterradora historia de un brutal asesino cuyos vecinos nunca sospecharon lo que ocurría detrás de la puerta de su casa.