Hace dieciocho años, la princesa Nisha se convirtió en princesa a los pocos días de nacer. Todo ello envuelto en un fuego que ninguno de ellos pudo extinguir.
O eso dicen legalmente. Lo dicen en voz alta. ¿Verdad? Tal n.
Pero esas son las palabras que Nisha nunca ha oído.
No podía creerlo, porque nunca sonaron igual. Nadie le creyó cuando cumplió once años y se convirtió en rey del Bajo Reino.
No le creyeron cuando sus poderes y sus prolíficas habilidades empezaron a funcionar con resultados aterradores. No pasaba nada si no querían creerle cuando volvió a casa y coronó rey a Darke, se lo demostró. Si era reina, encontraría todos los vicios que había conocido.
No le importa quién o qué sea la chica, porque les mostrará lo que necesitan saber de ella. Les muestra lo que le ocurrió cuando le robaron el oro. Porque él es el hijo de Nisha.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)