Asuntos de Oriente Próximo: Aventuras bélicas de Zahos Hadjifotiou en Tobruk, El Alamein y Rimini

Título original:

Middle East Affairs: War Adventures of Zahos Hadjifotiou in Tobruk, El Alamein and Rimini

Contenido del libro:

"Un veterano de la Segunda Guerra Mundial relata de primera mano los horrores vividos en sangrientos campos de batalla y las apasionadas relaciones en clubes nocturnos de Oriente Medio como soldado griego.

La vida de Hadjifotiou (Juegos de pasión en Mykonos, 2015) se vio interrumpida por la guerra, ya que la invasión de Grecia por Mussolini le impulsó a abandonar su hogar y unirse a la lucha contra las potencias del Eje. Se alistó en el ejército británico y llegó a la ciudad portuaria de Tobruk (Libia). Allí formó parte de las famosas "Ratas del Desierto", hombres que pasaron ocho meses infernales bajo el asedio de las tropas del mariscal de campo Erwin Rommel: "Treinta y cinco mil heridos y varios miles de muertos". La reputación de Hadjifotiou como uno de los héroes de Tobruk le valió numerosos ascensos y condecoraciones militares. Finalmente fue asignado a pilotar una grúa llamada "Mac" para rescatar vehículos aliados y salvar a soldados atrapados. Entre el asedio y las batallas contra las fuerzas alemanas tanto en El Alamein, Egipto, como en Rimini, Italia, pasó muchas de sus noches con compañeros de armas actuando en los clubes nocturnos urbanos de Egipto, y más tarde de Beirut, buscando el placer y el lujo con alcohol y mujeres. El autor rememora sus aventuras bélicas con un romanticismo seco, sin rehuir nunca sus experiencias, ya se trate de noches cargadas de vodka o de combates cuerpo a cuerpo en el campo de batalla.

Hadjifotiou es irascible y apolítico, propenso a la nostalgia de formas inesperadas: el soldado recuerda su grúa con más sentimentalismo que su matrimonio relámpago con la hija de un general francés. Cuando se reencuentra con su amor perdido, Yuki Russell, una cantante judía-estadounidense a la que conoció al principio de la guerra, es probable que su entusiasmo resulte chocante para algunos, ya que antes parecía haberla olvidado por completo. Estas rarezas no se endulzan, no se racionalizan estos giros arrogantes o imprudentes, como tampoco los heroicos. Lo más cerca que está el libro de exculpar las acciones de alguno -desde el mujeriego hasta el saqueo- es sostener que los que no estuvieron allí no pueden saberlo. La autobiografía es notablemente concisa, quizá en detrimento suyo: es poco probable que los lectores se sientan transportados a clubes nocturnos o zonas de guerra con su enfoque minimalista.

Unas memorias concisas y sin remordimientos, tanto sobre los buenos tiempos de la guerra como sobre los malos".

-- Kirkus Reviews

19 de agosto de 2016.